De año en año…

No, el título no se refiera a cada cuanto actualizo actualmente (valga la redundancia)

Ni a que no escribía desde el año pasado

Nota: Cosa que es cierta, pero espero se me perdone

Pero entre vuelos, fiestas, reencuentros, memorias, recuerdos, alegrías, celebraciones, despedidas, más vuelos, vueltas al trabajo (bueno, esto en singular), trabajo y más trabajo…

Casi que no he podido…

Pero vayamos por partes

Regalazo

Quizás sea porque Seattle lleva una semana cubierta de nieve… 

Quizás por la proximidad de las fiestas…

Quizás porque hace un año que soy Doctor… 

Nota: Y tengo la impresión de saber aún menos que antes!

 

O quizás será el café…

 

No sé…

la verdad es que no sé por qué… 

 

Pero lo que es un hecho es que el Ministerio se ha enternecido…

y me han hecho un regalo (otro más)

un regalazo…

Regalitos…

Ya hace un  mes que pasó mi cumpleaños, 

pero ya se sabe (porque lo he repetido hasta la saciedad)…

Nota: O, como decimos los científicos para hacernos los interesantes, ad libitum

…que «esto» del post-doc ocupa mucho tiempo, y que el tiempo pasa volando

Nota: O, como decimos los «flipaos», tempus fugit

pero quería aprovechar para hablar de un par de regalos que he recibido, y que me van a hacer (o eso creo yo) rico… 

Como decíamos ayer…

así empezaba las clases un profesor mío… aunque el «ayer» fuera la semana pasada…

o el mes pasado, en este caso (glups)

Nota: No, no he cerrado el blog todavía, hasta que no sea famoso (por lo menos) nada, jeje

Y es que ya sabía que el tiempo pasa rápido, que si tempus fugit y carpe diem y más expresiones en latín que no sé pero que quedarían muy bien aquí… 

Pero esto del post-doc va más rápido de lo que pensaba y ya se sabe, que cuando todo va rápido uno sólo mira adelante… 

que si no entra vértigo…

…o mareo, claro

 

Pero aún así hay mil cosas que contar (a parte de trabajar como un «machaca» que se precie)

Nota: Machaca es la terminología para describir a cualquiera que haga la tesis, no hay otra palabra mejor 🙂

Culturizándome…

Como diría mi madre… 

no tengo perdón de Dios.

 

Lo sé, lo reconozco y lo acepto, pero es que uno no tiene tiempo para nada… 

Creo que es la consecuencia de hacerse mayor… 😉

 

Pero bueno, aún así he conseguido tener cierto tiempo para la integración…

para la inmersión cultural…

vamos, en otras palabras

El «buga»

Si hay una cosa imprescindible en los yuesey,

algo sin lo cual no eres nadie,

o incluso menos que nadie…

Es, sin lugar a dudas,

Tú pasas?

Todo empezó una mañana de verano..

Putobiólogo (uséase, yo mismamente) se encontraba en la calle para ir a recoger a sus amigos cuando,

en ese momento,

pronunció una de sus famosas frases míticas, de las que perdurarán en la memoria popular por los siglos de los siglos:

Joder, pues hace un frío de narices*… 

 

Nota: Exactamente no dije narices, pero estoy en horario infantil…

 

Y es que no llevaba chaqueta y el verano de Seattle puede ser muy tocanarices cambiante…

O sea que ahi estaba yo, pobre de mí, pasando frío…

Cuando se me ocurrió una idea

Nota: Para una vez que se me ocurre algo, lo cuento

 

Una GRAN idea…

El Anfitrión

Eoooooooo!

Toc.. toc…

Holaaaaaaaaaa?

Hay alguien ahí?

Que he vuelto!!!

Sí sí, no es que me hubiera ido, desvanecido, transfigurado o algún que otro sinónimo más…

No, no…

Ni me he ido de vacaciones… lo que ha pasado es que he tenido visita

Idas y venidas

Tenía ganas de escribir,

la verdad es que hasta tenía algo de mono…

y es que el retraso no se ha debido a mi dejadez (que también), sino sobre todo a la falta de tiempo.

Pero es que se ha dado una conjunción de situaciones:

Nota: Parezco el del horóscopo hablando

Nota2: Algún día descubriré por qué los científicos leen (y creen) el horóscopo….

Reentrada

Dicen que la reentrada es el momento más peligroso de cualquier viaje espacial, que es justo el momento de volver a la atmósfera terrestre el que decide el futuro de uno…

mejor dicho…

decide si uno tiene futuro o deja de tenerlo en ese mismo instante

Nota: Sólo hay que acordarse del transbordador Columbia….

Y dándole una vuelta de tuerca he pensado que, en verdad, todas las reentradas son complicadas…